Crear produce felicidad.

Me sorprende que algunos de mis amigos, cuando estuvimos en Londres, quieran tener su propia foto del Big Beng. No me refiero a una en la que aparecen ellos y el reloj, sino una del reloj, solo del reloj, hecha por ellos mismos. ¿No podrían encontrarlas mucho mejores en Internet? ¿para qué quieren hacer una más, y seguro que no la mejor, de aquello que tanta gente ha fotografiado?

He llegado a entenderlo pensando en mi propio blog.

Crear es algo que produce gozo. Ser tú quien consigue que algo que no existía exista conlleva una gran felicidad.

Un tema clásico que acapara mi atención una y otra vez es el paso del tiempo. Lo llaman con la expresión latina Ubi sunt. ¿Dónde se fueron los años pasados? ¿Qué quedo de aquellos días que ahora suponemos llenos de dicha?

Estoy pasando unos días en Isla Cristina, una playa de Huelva, y visito la playa de mi infancia, la Antilla. Apenas si quedan algunos edificios de entonces. Y los que existen están tan cambiados que no los reconocemos. Me gustaría poder escribir unos párrafos nostálgicos que atraparan ese dolor que se siente ante lo que definitivamente se perdió. ¿Por qué además de aquellos años el tiempo ha hecho desaparecer los sitios en que nuestros recuerdos tuvieron lugar? Vuelve uno a esos sitios pensando que allí encontrará algo de lo que murió, pero el dolor es doble. Además de haberse borrado casi completo de tu memoria lo que pasó, también ha desaparecido el parque donde pasó. Me engaño pensando que si en ese escrito consiguiera ser lo suficientemente expresivo el dolor encontraría un cierto alivio. O que si pudiera captar la esencia de ese fenómeno conseguiría “comprender”.

Del mismo modo que otros repiten de modo vulgar la misma foto hecha mil veces, yo encuentro satisfacción en repetir de nuevo por escrito el mismo lamento que hicieron tantos antes que yo. Me gustaría construir mi propio ubi sunt. ¿Acaso creo que lo voy a hacer mejor que los grandes poetas? No. Pero uno encuentra felicidad en producir por uno mismo algo que anteriormente no existía. Es cierto que no es algo completamente nuevo. Pero es el tuyo y te sientes orgulloso aunque sea una triste copia de algo que ya alguien hizo mejor.