Responsabilidad en la vida de otros.
Hace unos años la selectividad constaba de seis exámenes. Seis asignaturas. Un punto más o menos en la nota de una asignatura era relativamente irrelevante porque se diluía en el conjunto. Con el ánimo de suavizarla nuestros políticos la redujeron a cuatro asignaturas. De este modo la importancia de las cuatro asignaturas que quedaban aumentó. El curso pasado me entró miedo de ser en parte responsable de la nota que los alumnos sacan en esta prueba. Parece que con los años voy cogiendo miedo a cosas que antes no me asustaban. Es como si disminuyeran las fuerzas…
Quería copiar aquí el correo que me envió un alumno enfadado porque le parecía que no les había dado los apuntes adecuados para selectividad. Lo cierto es que había una pregunta posible que tardé mucho en dársela. Se la envié una vez terminado el curso, cuando ya estaban puestas las notas, explicándoles que era una pregunta posible aunque improbable. Era muy tarde ya estaban estudiando para selectividad. Me pareció bien que el alumno fuera sincero. Cuando alguien te dice que eres buen profesor tienes dudas sobre su sinceridad. Cuando es al contrario sabes que es completamente sincero.
“El examen era una opción B sobre Nietzsche y una opción A sobre Aristóteles, pero en la opción de Aristóteles en vez de incluir un epígrafe sobre él, incluía el epígafe 0 de Descartes que enviaste el día siete y sobre el cual insististe que era muy improbable que cayese, por lo que no, no estoy contenta con el examen ya que ese epígrafe me lo había leído y poco más. Espero que te sirva de ejemplo de cómo si que entran este tipo de epígrafes (los introductorios) en los exámenes, y en un futuro los entregues como parte de los apuntes, porque son dos puntos y medio prácticamente perdidos en un examen muy importante. No cogí el texto de Nietzsche porque era complicadísimo y, la verdad, no sabia por donde cogerlo, además de que los conceptos a definir ni siquiera me sonaba haberlos visto anteriormente.”
Se podrían dar muchos argumentos para defenderse de sus acusaciones pero desde luego al alumno no le faltaba gran parte de razón. No voy a decir que me gusta recibir este tipo de correos, pero me gusta saber que vivo en la realidad. Si pusiera la vista únicamente en el feedback que me dan algunos alumnos podía creerme que soy un profesor excelente. No cierro los ojos a esas alabanzas pero me gusta tener también presentes correos como el que he copiado.
Cuando supe las preguntas que habían caído en selectividad tuve el temor de que las notas fueran malas, pero luego las notas fueron bastante buenas. Uno hasta sacó un 9,5.
ResponderEliminarLa media estaba un punto por encima de las notas del distrito. Y comparadas con las notas de otras asignaturas, las de filosofía no eran peores.