BEBIENDO DESDE PRIMERA HORA DEL DÍA
A las nueve y media me encuentro en un pub del barrio para
tomar un “traditional breakfast”. Cada vez que el camarero me pregunta algo
tengo que pedirle que me lo repita. Gracias a eso consigo entenderme con él. Me
encantan las beans que sirven aquí. En España solo las encontré una semana
santa en Benidorm, en un hotel de esos donde hay bufé para extranjeros.
En España habitualmente solo tomo un vaso de leche con
galletas maría. Pero a las 11:15 vuelvo a tomar algo. Como no tomo nunca
café suelo tomar una caña. Soy una persona de natural nervioso y si tomara café
me subiría por las paredes. Ya sé que es una hora muy temprana para beber
alcohol pero no se me ocurre tomar otra cosa. Al principio, me preocupaba un
poco que mis compañeros pudieran pensar que si ya tomo una caña tan temprano luego
me tomaré un montón más a lo largo del día. Lo cierto es que suelo tomar otra
en el bar al atardecer y para de contar.
Aquí no tendría ese temor, observo que muchos británicos
toman cerveza desde primera hora del día. Al menos en el pub donde estoy así
es. A mí no me parece raro tomar una caña a las 11 y media pero si a las 9. También
observo que la lata habitual que te venden en el Waitrose (el nombre del super)
contiene 440 ml, o sea, una pinta. No encuentro latas de nuestro tamaño.
Recuerdo que cuando estuve en Leeds hace dos o tres años con
mi amigo británico él se tomó dos pintas (casi un litro) en el rato que
estuvimos juntos. A mí me parece demasiado. Yo tras la primera pinta pedí solo
media. Uno sabe teóricamente que en países distintos hay costumbres distintas
pero no deja de sorprenderse cuando lo vive en primera persona.
Postdata 1. Las beans de mi desayuno de hoy estaban buenísimas.
Postdata 2. Un día el director de mi centro me vio tomando cerveza y al día siguiente el encargado del bar me dijo que por tratarse de un centro educativo no podía servirme bebidas con alcohol. A otro compañero y a mí nos fastidiaron el recreo. Ahora solo tomo el pincho, un plato enorme de patatas con salsa rosa, que me cuesta 95 céntimos. Eso que me ahorro.
No hay comentarios:
Publicar un comentario