14 abril, 2008

EDUCACIÓN SEXUAL

No sé si lo hago bien o mal. En algunas ocasiones, en clase de ética de cuarto o en tutoría me meto a decir algo en el tema de la sexualidad. Ya os digo no estoy seguro de acertar. Os copio a continuación el documento que utilizo. Yo no sé si lo hago bien. Eso sí os digo: No estoy creo que otros lo hagan mucho mejor.

EL PELIGRO DE UN EMBARAZO.
Soy consciente que la naturaleza ha unido sexualidad y reproducción aunque los seres humanos podemos separar ambas cosas.
- Sé que un único acto sexual puede conllevar un embarazo no deseado.
- Sé que un embarazo no-deseado puede tener consecuencias gravísimas para mi vida.
- Sé que un embarazo no-deseado es un problema que no tiene ninguna solución buena.
PRIMERO: Porque tener un hijo y educarlo exige una madurez psicológica y una independencia económica que aún no poseo.
SEGUNDO: Porque abortar (independientemente de las consecuencias negativas que tiene para el embrión) puede ocasionar daños psicológicos a mi personalidad que aún está formándose.

EL PELIGRO DE LA TRIVIALIZACIÓN.
- Sé que los seres humanos somos seres psicosomáticos. Es decir, que lo que hacemos con el cuerpo influye en nuestra mente y viceversa. Por esto sé que las relaciones sexuales son algo importante en la vida de una persona y no deben tomarse a la ligera ni trivializarse como si fuesen un entretenimiento más.
- Sé que la intimidad sexual crea unos lazos afectivos entre las personas. Por este motivo creo que es bueno que antes de mantener relaciones sexuales los dos miembros de una pareja sepan muy bien qué es lo que el otro miembro busca en la relación y que ninguno se engañe con respecto al otro.
- Creo que es bueno que la decisión de tener relaciones sexuales se tome fríamente, es decir, que sea una decisión pensada seriamente y no tomada de modo apresurado y llevado por la pasión de un momento concreto.

Por todo esto:

ME COMPROMETO a tomar en serio mi sexualidad y a tomar cualquier decisión sobre ella de un modo meditado.
ME COMPROMETO (tanto si soy varón como mujer) a evitar las prácticas sexuales que puedan provocar un embarazo no deseado (relaciones sin preservativo, coito interrumpido, etc.)
ME COMPROMETO a no engañar a nadie con respecto a mis intenciones en una relación.
Soy consciente de que es fácil confundir el deseo sexual con el enamoramiento y ME COMPROMETO a intentar no confundirlos.



Como veis tiene la forma de un contrato. En realidad nunca lo uso como tal. Aunque la idea original era que tras reflexionar sobre él quien quisiera lo firmara.
En fin, diré lo que Descartes de su Discurso del Método: Espero que haya ayudado a alguno sin hacer daño a ninguno.

2 comentarios:

  1. En cuanto tocas el tema educativo parece que no inspiras comentarios. Y sin embargo me parece buena idea el contrato.

    ResponderEliminar
  2. Creo que es cierto eso que dices de la trivialización y que somos seres psicosomáticos. El problema es que solo se aprende bien con la experiencia. Digamos que al menos adviertes de lo que sucede para que no te pille por sorpresa.

    ResponderEliminar