27 septiembre, 2016

Una carta a mis viejos alumnos.

He enviado a mis alumnos del curso pasado, que este año están en segundo de Bachillerato el siguiente mail:



Es extraño el trabajo de profesor en lo que respecta a las relaciones personales.

Durante todo un curso pasas varias horas a la semana -¡todas las semanas!- conviviendo con unos alumnos que al año siguiente no volverás a ver más, o en el mejor de los casos , la relación quedará reducida a cuatro saludos por los pasillos del insti.

Durante todo un curso, te encariñas –por decirlo de algún modo- con un montón de gente y al año siguiente la vida sigue, ellos continúan sus estudios, y ya hay un montón de gente más joven en tus aulas con la que habrás de encariñarte de nuevo.

Envío este correo a los que fuisteis alumnos míos en primero el año pasado y a los que previsiblemente no daré clase más.

No niego que hubiera momentos malos, pero no quería terminar nuestra relación sin deciros que fue un placer pasar un año con vosotros y hubo ratos en que lo pasé muy bien en vuestra compañía.

Aunque algún rato aún nos veremos este curso por los pasillos, os deseo a todos lo mejor y ojalá que consigáis en la vida lo que os propongáis.

Recibid un abrazo cada uno de mi parte.

¡Que os vaya muy bien!

No hay comentarios:

Publicar un comentario