21 enero, 2015

Respondiendo a Cristina

Esto viene de aquí

Creo que ante los que mandan se adoptan dos actitudes opuestas.

Algunas personas parten de que están allí para aprovecharse y que suelen hacer las cosas mal. Su mirada contra el que manda siempre es crítica e implacable.
Otros se sientes responsables del poder, se preguntan cómo lo harían ellos si estuvieran en ese puesto, y suelen ser más compresibles y menos críticos.

No digo que solo existan esas dos actitudes, pero entre esas dos yo estoy entre los segundos. Tiendo a creer que lo intentan hacer bien y que no son tontos. Aunque ellos se empeñen en demostrarme lo contrario, en demasiadas ocasiones. :)

Cuando escuché las declaraciones del Consejero no me parecieron tan disparatadas.
Yo no entendía que quisiera criminalizar a Teresa Romero. Contaba lo que sabía.

El asunto es que yo veo el contagio como un asunto de mala suerte. Es decir, haciendo todas las cosas muy bien, podía haber habido contagio. Y al contrario, haciéndolas mal o regular, podía no haberlo. Y una vez que han sucedido las cosas mal construimos todo un relato coherente con ese hecho y crucificamos al alguien o nos ponemos medallas por doquier si han salido bien, sin entender que posiblemente no sea ni una cosa ni otra.

Nada más que se contagia Teresa parece que tenemos las peores autoridades del mundo y las más torpes. Pues no. Ni tanto ni tan calvo. Al poco tiempo en USA se contagió otra enfermera y se vio que la cosa era algo más común de lo que parecía, y que en todas partes cuecen habas.

¿Qué pasa luego? Teresa se cura, nadie más estaba contagiado, el Ébola desaparece de España. Mi explicación: cuestión de buena suerte. Teresa pudo morir, y Teresa pudo haber contagiado a alguien, si la mala suerte hubiera estado en nuestra contra. Ni la Sanidad de España es la mejor porque Teresa se curara, ni las cosas se hicieron horrorosamente mal porque se infectara.

La charla que se les dio al personal (por lo que yo conozco) fue insuficiente, solo fue teórica, vieron ponerse y quitarse un traje pero ninguno probó realmente a hacerlo hasta que no tuvieron que hacerlo de verdad. Pero siendo así, cuando tratan al primer misionero nadie se contagia. Cuestión de buena suerte. Cuando tratan al segundo, por la razón que sea, se contagia Teresa. Ni la primera vez se hizo bien, ni la segunda mal.
Tengo un amigo médico muy crítico con todo el sistema sanitario. Siempre ve razones económicas y no médicas en las actuaciones médicas.
Todos los médicos de España recibieron por mail mil correos teóricos en relación con el modo como tenían que actuar ante un caso de Ébola.
¿Qué hubiera sucedido si se hubieran dado charlas largas, prácticas y costosas en todas las provincias a todos los médicos españoles? ¿Qué hubiera pasado si mandan montones de trajes de todas las tallas a todos los médicos de este país? ¿Qué pasa si después de todo eso no aparece ningún caso de Ébola?

Sé lo que hubiera dicho mi amigo: que ante una posibilidad ínfima de que apareciera un caso en España alguien se ha llenado el bolsillo vendiendo trajes y dando charlas por toda España.
Quiero decir que la situación de la autoridad es muy difícil. Tienes que encontrar la medida justa de las cosas y a veces incluso haciendo las cosas bien pueden salir mal.

Pero entrando en el asunto de las declaraciones del Consejero a mí no me parece que quisiera criminalizar a Teresa. En aquel momento se estaba diciendo que la paciente había acudido al médico y la habían despachado como si la cosa no tuviera importancia. Había que explicar eso. El Consejero no se trata de que tuviera dos versiones (la de la médico y la de la paciente) y escogiera como dices la que le convenía. Escogió la más creíble y la que constaba en un informe, la de la médico. ¿Y por qué era la más creíble? Porque nadie puede entender que si la médico es informada de que la Teresa había tratado con Ébola no lo hiciera constar en el informe. ¿Qué motivación podía guiar a una médico normal y corriente para no darle importancia a eso? ¿Qué ganaba la médico si la despachaba sin tomar medidas más importantes? En el informe no figura esa información porque Teresa no la dio. Y por eso Teresa ha tenido que rectificar. Porque cualquier juez le hubiera dado la razón a la médica al no entender qué podía mover a la médica a esconder eso en un informe cuando ella no ganaba nada con hacerlo.

El Consejero dijo: Teresa pudo mentir a su médico. Quizás la palabra no sea del todo acertada pero lo cierto es que Teresa, seguramente por miedo, por las misma razones por las que alguien tarda un mes en ir al médico cuando descubre un bulto que puede ser peligroso, Teresa, no dijo nada a su médico y eso es lo que el Consejero puso de manifiesto.

Hay otra declaración que te enfada y a mí no. Lo de que él se iba a su casa, que no necesitaba el cargo. No entiendo qué te disgusta tanto. Un médico que se ha metido en política pensando que puede hacer un buen papel se siente acosado y se pregunta ¿pero qué se pensará esta gente que tanto me critica? Como si yo estuviera aquí para sacar partido del cargo. Y se lo dice a los periodistas con franqueza, sin andarse con contemplaciones. Yo soy médico, me he ganado la vida como médico y si me tengo que ir… trabajo y dinero no me va a faltar. Y lo dice así porque no todos los que están en cargos pueden decir eso.
Lo dije en el primer post. Su mayor estaba en no ser diplomático, en no comportarse como un político.


En fin, lamento que nos encontremos en posiciones dan distantes en este asunto. No desesperes, mujer, seguramente encontramos algún otro tema en que podamos entendernos.

:)

2 comentarios:

  1. ¿De dónde los sacan? Es lo que yo me pregunto. ¿Hay un casting a la inversa? ¿Cómo puede ser que Ana Mato sea Ministra, o Leire Pajín, o …?

    Alguien enferma tratando de salvar a alguien. Y en vez de mostrar empatía y respeto el Consejero se dedica a ir echando broncas a los analfabetos que lo han puesto, a él, en esa situación. “Para ponerse un traje no hace falta un máster”. En esa frase no sólo está reflejada su categoría moral sino, lo que es peor, su ignorancia. Porque sí hace falta un máster.

    Ah, la prepotencia de los que están en política perdonándonos la vida. Estoy vago. Lo explicó bien Manuel Jabois.

    “Hay una delación en esta frase del consejero de Sanidad de la Comunidad de Madrid: «Si tuviera que dimitir, dimitiría. Yo soy médico, tengo la vida resuelta». No tiene que ver con la prepotencia de la fórmula ni con el delicado «a mi plin, soy Ordóñez Dominguín» que sale de ese «yo soy médico». Es una delación sintomática, por decirlo en su lenguaje, que además procede del subconsciente y revela una miseria común de la política española. Basta enfrentarla a esta otra frase: «Si tuviera que dimitir, dimitiría. Puedo servir a los ciudadanos de otra manera». O incluso a ésta: «Si tuviera que dimitir, dimitiría. Pero me fastidiaría porque tengo la vida resuelta».

    No: el consejero ni siquiera se refiere a que su vida esté resuelta en términos filosóficos. El consejero habla del dinero. Que puede irse de la política, porque dinero ya tiene. Si no lo tuviese debería seguir abroncando a los pacientes por inútiles y poco estudiados, dependiendo del protocolo que se hubiesen saltado. Hay una delación que es la naturalidad con que relaciona la política y la fortuna, como si la abundancia de lo segundo convirtiese lo primero en irrelevante. También hay una conclusión dada por él mismo, y es que en política él ya no pinta nada. Lo ha ganado todo, como Iker Casillas.”

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  2. Gracias por la respuesta, Loiayirga, la verdad es que te la has currado :-)

    Hay temas de los que hablamos sin tener muchos conocimientos. Yo no sé nada sobre el ébola, más allá de los datos fundamentales, y tampoco de medicina. Sin embargo, hay algunos hechos que son públicos y supongo que ciertos:

    Existía una planta en un hospital especializada en enfermedades infecciosas, como el ébola, que se desmanteló por los recortes. Dos misioneros, uno primero y otro después, se contagian de esta enfermedad en algún país africano y son repatriados para ser tratados en España. Los llevan a la planta de ese hospital, tras acometer obras de acondicionamiento en muy poco tiempo. Los sindicatos médicos y de enfermeros (que sí saben de este tema) dicen que la planta está medio en obras, que faltan los medios y que la formación del personal ha sido insuficiente.

    Una auxiliar se contagia y la culpan a ella, tachándola en el primer momento de incompetente y mentirosa. No se oye ni una palabra de autocrítica sobre la gestión, aun habiendo quedando clara la falta de previsión. Mucha paja en el ojo ajeno y mucha viga en el propio. A propósito, no hacía falta acondicionar todos los hospitales de España porque por eso existen los centros de referencia.

    Los hechos hablan por sí mismos.

    Después dices que fallaron las formas pero dando a entender que no es para tanto. No estoy de acuerdo: las formas son fundamentales. De hecho, las formas son más que formas. Se trata de mantener el liderazgo para que el equipo pueda trabajar eficazmente. Se trata de gestionar sabiamente los recursos humanos para hacer frente a una crisis. Un responsable tiene que asumir responsabilidades. Va con el cargo. Culpar al último eslabón de la cadena es incumplir con el deber, amén de una falta de respeto como un piano cuando esa persona se ha contagiado de una enfermedad grave por ayudar a otros.

    Sobre la versión del médico y la auxiliar, no sé por qué dices que de entrada una es más creíble que otra, la verdad. ¿Qué es más increíble que alguien que sabe que puede estar contagiado y morir, mienta? Creo que a eso se le llama clasismo, fíjate: la opinión de un médico vale más que la de una auxiliar. Es más, no sabemos si realmente no lo dijo, o si no se acuerda, en cuyo caso no puede acusar a la médico por lo que prevalece la versión de ésta.

    Respecto a la chulería del consejero de que "'él se puede ir porque ya tiene dinero", estoy de acuerdo con lo que dice M.A., con el que también concuerdo en el tema del Charlie Hebdo (no seguí porque el debate se nos estaba yendo de las manos). Si analizamos la frase del consejero, se concluye:

    - Que para él el servicio público es lo de menos. Que hable de SU dinero en un momento de crisis de salud pública da medida de la catadura moral del personaje.
    - Que como tiene dinero puede actuar irresponsablemente, porque, "total, al mínimo lío me las piro".
    - Que para él quienes tiene que buscarse la vida y sacar las castañas del fuego los que están achuchados de dinero, que son a los que les hace falta.

    Con el corolario siguiente: si no tuviera dinero no dimitiría ni loco porque SU dinero es más importante que el servicio público.

    En fin, muy lamentable. Lo peor es que la actitud del consejero éste es habitual, con grados variables de desfachatez.

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